viernes, 26 de febrero de 2010

La carboxiterapia

La carboxiterapia se usa para mejorar la circulación sanguínea cuando existen úlceras vasculares, para disminuir los tejidos grasos (rompiendo la membrana de la célula grasa) y para rejuvenecer la piel.  Al lograr una oxigenación se mejora la elasticidad de la piel. El tratamiento se utiliza también como complemente de la lipoescultura.

La carboxiterapia es un tratamiento que utiliza el anhídrido carbónico de forma terapéutica.

Es un procedimiento no quirúrgico que se realiza por vía percutánea, subcutánea o intradérmica.

Se realiza con micoinyecciones de anhídrido carbónico que se aplican con una aguja muy fina en la zona a tratar. La aguja está conectada a un instrumento que regula la velocidad del flujo, el tiempo de infusión y la dosis.

El gas no es nocivo ya que el cuerpo lo expulsa a través de la transpiración. Normalmente los tratamientos requieren de unas 20 sesiones, dos veces por semana. Los tratamientos faciales una vez a la semana. Cada sesión tarda unos 20 minutos y el paciente puede regresar a sus actividades diarias inmediatamente.

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