La rinoplastia es un procedimiento ideal para aquellas personas que buscan una mejoría, y no una perfección absoluta, en su apariencia. Deberá poseer un estado general de salud bueno, estabilidad psicológica y ser realista con las expectativas deseadas.
Tiene que tener en cuenta, que la rinoplastia mejorará su apariencia y la confianza en si mismo, pero no conseguirá que se parezca a otra persona o ser tratado de manera diferente. Por lo tanto, es fundamental que antes de decidirse por una rinoplastia, tenga claro que resultados pretende conseguir y discútalo con su cirujano plástico.
En cuanto a la edad, los cirujanos plásticos prefieren no realizar una rinoplastia hasta los 14 o 15 años en las niñas y algo más para los niños. En el caso de los adolescentes, es importante considerar los ajustes emocionales, y estar seguros de que son ellos, y no sus padres, los que quieren someterse a una rinoplastia.
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