Es fundamental que exista un buen entendimiento entre usted y su cirujano. En la primera consulta se chequeará la visión y la producción de lágrimas, así como su estado general de salud. Debe comunicarle a su cirujano si toma alguna medicación, si fuma o si tiene alergia a algún medicamento. También debe avisar si lleva gafas o lentillas y presentar, si es posible, su último examen oftalmológico. Se discutirá acerca de la posibilidad de operar los cuatro párpados, los inferiores o los superiores y/o si es preciso utilizar algún otro procedimiento. Se le explicarán las técnicas y el tipo de anestesia que se emplearán, en qué lugar se realizará la cirugía, sus riesgos y el coste de la operación.
La blefaroplastia estética no está incluído en el catálogo de la Seguridad Social. No se olvide de preguntar a su cirujano todas las dudas que tenga, sobre todo aquellas relacionadas con sus expectativas y los resultados.
Su cirujano plástico le explicará las instrucciones específicas sobre cómo prepararse para la cirugía, incluyendo normas sobre su dieta diaria de alimentos y líquidos, tabaco o toma o supresión de medicamentos y vitaminas; y el cuidado con respecto al lavado de la cara. En cuanto al tabaco, es importante dejar de fumar al menos una o dos semanas antes de la cirugía. Cuanto más cuide de cumplir las instrucciones previas, logrará que la cirugia sea realizada en mejores condiciones. Será necesario que algún familiar o acompañante pueda llevarle a casa cuando se le dé el alta y que, en caso necesario, le acompañe algunos unos días.
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